· Jóvenes: Tienen todo el tiempo y la energía, pero no dinero.
· Adultos: Tienen dinero y energía, pero no tienen el tiempo.
· Ancianos: Tienen el dinero y el tiempo, pero no la energía.
Por toda la casa se esparce un olor agridulce a membrillo, a orejones de calabacita y pera, a pasta de higo y a ejotes pasados por agua que,...