Los primeros auxilios. Quemaduras

Se entiende por primeros auxilios a los cuidados inmediatos y temporales que se le brindan a una persona que es víctima de un accidente. El principal objetivo es salvar la vida de la persona afectada.

Dichos accidentes son imprevistos, pueden suceder a cualquier hora y en cualquier lugar, cuando menos te lo esperas.

Generalmente para este tipo de circunstancias no estamos preparados, por lo que para atender un accidente es necesario estar capacitado correctamente, por eso es importante que todos conozcamos los procedimientos a seguir en dado caso de que se presente un accidente.

Existen diferentes tipos de accidentes, los cuáles pueden ser:

·         Caídas.

·         Heridas.

·         Fracturas.

·         Atragantamiento.

·         Hemorragias.

·         Ahogamiento.

·         Descargas eléctricas.

·         Quemaduras.

·         Intoxicaciones.

En esta ocasión, se observarán que accidentes son provocados por quemaduras, ya que es importante que sepamos qué hacer en caso de que se presenten.

Las quemaduras son lesiones de la piel producidas por el fuego, radiaciones, objetos calientes, líquidos o vapor. Las más frecuentes son las producidas por una plancha, o un boiler.

La gravedad de las quemaduras depende de la extensión y de la profundidad que tengan y se clasifican en:

·         Quemaduras de primer grado. Afectan la capa superior de la piel, la parte afectada se pone roja y se inflama, el dolor disminuye después de 48 horas.

·         Quemaduras de segundo grado. Estas quemaduras son originadas por líquidos y flamazos que afectan la piel y el tejido que se encuentra debajo de ella. La inflamación es moderada y se caracteriza por la aparición de ámpulas, que provocan dolor.

·         Quemaduras de tercer grado. En esta clasificación se encuentran las quemaduras que destruyen toda la piel y el tejido graso (dermis). Se pierde una gran cantidad de agua, lo que provoca una inflamación en las zonas afectadas.

Los pasos a seguir en caso de presentarse una quemadura son:

·         Si la superficie lesionada es amplia, protegerla con una tela.

·         Recostar a la víctima, tratando de no comprimir sus quemaduras.

·         No hablar o respirar sobre sus quemaduras.

·         No reventar las ampollas.

·         Cuando la superficie afectada es pequeña y la piel está intacta puede lavarse con agua.

·         También es conveniente usar hielo.

·         Puede usarse un vendaje compresivo “flojo”.

Nadie está exento de poder sufrir algún día este percance, por lo que es importante seguir estos pasos para contener de manera óptima el problema, y llamar a la ambulancia o trasladar a la víctima al hospital más cercano, de esa manera la quemadura no pasará a mayores, y la vida y autoestima del lesionado no se vendrán a pique.

Fuente: Serie Arcoíris. Ciencias Naturales 6.