Majin Boo

Hace unos cinco millones de años aproximadamente, el hechicero Bibidi concentró la maldad pura en un ser vivo: el Majin Boo, una criatura extremadamente malvada cuyo único objetivo era la aniquilación de toda la vida en el universo (objetivo que lo haría un villano muy simplón, aun así su saga es muy agradable, y para mí, son de mis episodios favoritos de Dragon Ball en su etapa Z).

Durante 10 años arrasó planeta tras planeta en un alocado frenesí de violencia y destrucción. Sólo de vez en cuando y para frenar las tendencias asesinas que Boo guardaba para su amo, Bibidi encerraba durante breves periodos de tiempo a su creación en una especie de huevo gigantesco. Sin embargo, los gritos de millones de inocentes víctimas fueron escuchados cuando los autoproclamados guardianes del universo, los Supremos Kaio Samas, decidieron poner fin al genocidio continuo. Sin embargo, el maléfico ser fue acabando poco a poco con todos los Supremos Kaio Samas. Primero mató a los guardianes de la parte Norte y Oeste del universo para, a continuación, absorber al del Sur. Para su desgracia, cuando estaba a punto de rematar al guardián de la parte Este, apareció el Gran Supremo Kaio Sama: un ser pacífico y bondadoso pero que a la vez estaba dotado de una fuerza de combate pocas veces igualadas en la historia del universo. Tras una breve pero intensa batalla, el Gran Supremo Kaio Sama parecía haber acabado con la amenaza del demonio rosado, pero este último sorprendió a su adversario absorbiéndolo.

Bibidi estaba seguro que esta nueva “adquisición” de Boo iba a convertir a su criatura en el ser más poderoso que jamás nadie haya conocido. Lo que no esperaba, es que el resultado de la fusión conseguiría que su maligno Boo se convirtiera en una criatura espantosa pero con la mentalidad de un niño terrestre de 5 años, esto fue debido a la bondad del Gran Supremo Kaio Sama que anuló la maldad de Boo y las fusiones de consciencia no pudieron ser digeridas por ninguna de las dos partes, en pocas palabras: había nacido un nuevo ser. La fuerza del maligno ser fue disminuida al no estar a un 100 % de maldad. Aprovechando esto, el Supremo Kaio Sama sobreviviente (el del Este) se ocultó para luego acabar con Bibidi, cuando el hechicero había enterrado a su creación en el huevo.

Babidi, hijo de Bibidi, llegó a la Tierra y en el año de 774 (Tiempo dragonballiano) sería liberado Majin Boo gracias a la energía acumulada de los saiyajines residentes en la Tierra. Tras una larga serie de combates contra los guerreros del planeta Tierra (Goku, Gohan, Gotenks, Vegeta, Ten Shin Han), el original Boo volvió a aparecer sustituyendo a la infantil figura que hasta entonces le había suplantado.

Con la aniquilación como meta final, Boo destruyó la Tierra y se dirigió al Planeta Sagrado para destruir las únicas amenazas que podría encontrar: Goku y Vegeta. A pesar de toda su fuerza, el demonio rosado fue destruido gracias al trabajo en equipo de Kakarotto y el Príncipe de los saiyajins, más unos inspirados Mr. Boo (la contraparte “ingenua” que se desprendió de Majin Boo) y Mr. Satán. Así, una espectacular Genki Dama creada por la energía de los habitantes de la reconstruida Tierra, borró para siempre la maléfica presencia de Majin Boo. A pesar de todo, Goku no se resignó a perder un rival tan fuerte y pidió a Enma Sama que la esencia de Boo reencarnara en un ser humano (que más tarde se presentaría como Oob).

Siendo creado por un mago, era prácticamente inmortal y podía moldear su cuerpo y regenerarse a voluntad. Su arsenal de técnicas especiales propias y asimiladas incluía el Henka Beam (con el que convertía a sus enemigos en ricas golosinas), Jinrui zetsumetsu kogeki (rayos de energía con los que aniquiló a la población terrestre), Shunkanido, Kame Hame Ha, Súper Ghost kamikaze attack, entre otras.

¿Qué se puede decir de este megavillano que protagonizó una de las 3 sagas principales (y muy largas por cierto) de Dragon Ball Z?, la verdad, no me cansaré de decirlo, es un villano simplón y sin chistes, si bien es original que a un demonio lo pinten de rosa y lo hagan ver al inicio como un niño que padece un severo retraso mental, el objetivo que busca este es muy llano y vacío, ya que no se aleja del estereotipo clásico de sólo destruir por la destrucción, sin tener realmente algo que como personaje lo haga interesante por sí mismo. No por lo mencionado anteriormente estoy diciendo que la historia haya sido mala, al contrario, todos los elementos alrededor de sus capítulos fueron muy divertidos y emocionantes, y para mí, son de mis episodios favoritos dentro de la historia de esta serie (aún y cuando he criticado al némesis principal por su simplicidad). Es un villano que cumple con el objetivo de entretener a una audiencia que “obligó” al autor a seguir con la obra, y pese a ser un personaje “bobo”, no se puede negar que es uno de los más poderosos peleadores, y que en cuanto a combate se refiere, si podemos considerarlo como uno de los mejores guerreros que han existido en este manga-anime.

Fuente: Guía de Personajes Dragon Ball A.Z. Kame Especial No.6