Las Redes Sociales. Lo Bueno y Lo Malo




Recordando el Post “25 Cosas que no soporto de Facebook” basado en el “trending topic” (tema muy comentado) de Twitter, menciono ahí que eso daba mucho material para hacer un análisis más extenso que no solo abarque los pros y contras del sitio de Mark Zuckerberg, sino de muchas otras páginas cuyo propósito es “relacionar” a la gente. Sabiendo que me voy a extender demasiado en esta “Reflexión”, inicio este asunto dando mi clásica advertencia de que si eres una persona de mentalidad cerrada y/o no estás acostumbrado a leer más de 3 párrafos en la lectura de artículos de Internet, mejor cámbiale de sitio y disfruta de las miles de opciones que la Web ofrece. Si tienes “paciencia” y eres un “lector cautivo”, agradezco el favor de tu atención. Todo esto está basado en opiniones personales dadas ciertas experiencias propias y ajenas.

Desde que el Internet se volvió un servicio accesible para un grueso de la población (es decir, desde que ya no se limitó a ciertas “élites”), uno de sus propósitos (aparte de ser una cadena mundial de difusión de pornografía) ha sido el de unir y relacionar a las personas, ya que lo admitamos o no, el ser humano es un ser social que en menor o mayor medida requiere de la compañía de otros seres, y como el servicio de “amigos por correspondencia” tenía ciertas limitantes, la Internet vino a revolucionar ese y otros parámetros.

En los inicios de la World Wide Web (cuando para acceder a ella se requería de una conexión telefónica con un modem que no se desconectara a cada rato), una de las novedades y “atractivos” eran los sitios de chat, donde uno (generalmente de forma anónima) entraba a una “sala” y podía entablar conversaciones con otras personas (generalmente anónimas), y dependiendo si había química o no, ya se intercambiaban los correos electrónicos o los nombres de usuario de ciertos servicios de mensajería, llámese ICQ, Yahoo Messenger, MSN/Windows Messenger, etc. Actualmente siguen existiendo muchos servicios de chat, pero ya no tienen el mismo atractivo de antaño, ya que es notorio que ha sido sustituido por otros productos que dan más prestaciones al usuario. ¿Qué tiene (o tenía) de bueno y de malo los chats?, la respuesta se las daré en el siguiente párrafo.

Lo positivo era el atractivo de la novedad, y su facilidad de uso, ya que con unos pocos clicks uno podía (o puede) entablar conversaciones con otro ente de cualquier parte del mundo al instante, siendo muchísimo más eficaz que el servicio postal de los “Amigos por correspondencia” que por su naturaleza logística es muy tardado (no se diga en el caso de mi México lindo y querido), además, de alguna u otra forma el anonimato ayuda a ser más extrovertido con los demás, lo cual, en el caso de mucha gente tímida, era (o es) una considerable ventaja para relacionarse con los demás. Lo malo de esto, aparte de que roba mucho tiempo (que se podría aprovechar en otras cosas, útiles o no), es precisamente el anonimato, ya que si la gente normalmente en la vida real suele mentir y exagerarlas bondades o desgracias de su existencia, con el recursos de poder esconder la identidad esto se incrementa a niveles casi enfermizos, existiendo muchas personas que de plano si tienen 2 o más vidas alternas muy alejadas de su “triste realidad”; y siguiendo con las desventajas del anonimato de la red, eso puede presentar muchos problemas a la hora del ligue, ya que normalmente la gente no es tan guapa, y para atraer a la “media naranja”, un recurso muy utilizado era poner fotos de otras personas más atractivas para enganchar a alguien más, surgiendo problemas si es que esa “química virtual” trascendió más allá de las conversaciones banales que habían, hay y seguirán existiendo en la Red. En conclusión, con respecto a este subtema, los “chats anónimos” no son para tomarse en serio, ya que el objetivo de muchos es de relacionarse con base en mentiras, lo cual no es bueno para nada, pero habrá sus adeptos.

Precisamente, dadas las limitaciones de los “chats anónimos”, surgieron los servicios de mensajería donde con un nombre de usuario fijo o con tu correo electrónico podías agregar contactos, con los cuáles podrías tener conversaciones más seguidas, y en cierta forma tendrías la seguridad de saber con quién estás hablando, ayudando a quitarle ciertas desventajas del anonimato. ICQ (el cual jamás llegue a utilizar), Yahoo Messenger (aunque no lo crean, existía y era algo popular) y MSN/Windows Messenger (antes de su “evolución” a Skype) fueron los servicios que le dieron ese plus a los chats cotidianos. Lo positivo radica en que aquí disponías de mayor conocimiento de tus contactos, y se podía dejar mensajes ya sea tanto en la aplicación de conversación como en correo electrónico (sembrando grandes raíces para las redes sociales famosas de este momento). Lo malo radicaba en que más gente te conoce, mayores problemas surgen, ya sea porque no les hablaste, te conectabas como “Invisible” o porque sólo la agregaste para pasar un rato, etc. Actualmente siguen vigentes, ya sea como productos solitarios o incorporados como estación de alguna red social.

Dados los antecedentes de los “chats anónimos” y los “servicios de mensajería”, es obvio que con la evolución de la tecnología del Internet mejores productos con mayores prestaciones (además del solo contactara conocidos y desconocidos), algunos perecieron en el camino y sólo pocos han trascendido, pero el común denominador ha sido el de incorporar otros elementos ajenos a la simple plática, desde la inclusión de fotos, escritos, hasta aplicaciones y juegos. Cientos de “Redes Sociales” de todos los sabores y colores están presentes en el mercado, y de ello haré su “análisis” desde ciertos antecedentes históricos hasta nuestros días.

En su momento (aproximadamente hace una década), MSN/Windows Messenger era uno de los servicios más populares de la Internet, y para ofrecer un plus más allá de las conversaciones y los simples perfiles, otorgo a sus usuarios la posibilidad de editar un perfil más elaborado por medio de spaces.msn.com (si no me equivoco), donde tenías chance de poner fotos y escribir artículos (De hecho aquí estaba el antecedente de este blog, como ya lo había explicado en “La Espectacular Entrada Número 195”), y a pesar de gozar de cierto prestigio, al parecer spaces.msn.com no le reportaba grandes ganancias a Microsoft, por lo que se elimino este servicio mudando ciertos “perfiles” a wordpress.com (pero yo ya no quise hacer eso en su momento).

La oferta de “redes sociales” se ha ido incrementando y conforme ha aumentado en público internauta, hasta productos de nicho se han creado. Son muchas las redes sociales que circulan en el mercado, y dependiendo de los gustos, necesidades y contexto de cada quien, es por lo que algunas tienen más fama que otras, y como hay cientos de opciones de estos artículos, sólo me limitaré a mencionar los que he usado, ya que por lo general son los más populares.

Después del uso de “Spaces” de Messenger, la red social que utilice fue el Hi – 5, el cual fue muy popular (a la par de Myspace, que sigue siendo usada por músicos, aunque no lo crean) ya que se podía comentar los perfiles y fotos de otras personas, jugar y participar en aplicaciones ociosas, lo cual generó un gran interés de muchas personas que se inscribieron en esta red. Lo bueno de esa experiencia fue que muchos comenzaron a perder el anonimato y mostrarse tal cual son, se agregaban y se quitaban los contactos sin mayores problemas, y hasta era agradable ponerle Hi’s a tus contactos (que eran como íconos que mostraban las características del individuo, si era listo, si era divertido, etc.). Por el lado malo, se trababa mucho, tenías fallas al abrirse un perfil en muchas ventanas (más de 30, y sin exagerar), no era muy discreto que digamos (ya que podías saber quien había visitado tu “página”), y desde que ya no se podían bajar fotos de manera fácil, poco a poco los clientes del Hi – 5 lo abandonaron para migrar a Facebook.

Facebook, sin lugar a dudas la red social más popular del mundo, y por los mismo, la mayor fuente de problemas. No estoy en contra de que casi todo el mundo tenga su perfil en Facebook, de hecho es bueno que la gente cada vez tenga más acceso al Internet, ya que fenómenos que existían desde mucho tiempo atrás han sido denunciados sin que funcionen los múltiples aparatos de censura (entre esos fenómenos estarían el bullying, las corruptelas políticas, los desplantes de la gente prepotente, etc.), además de que es eficiente para la comunicación con cualquier persona independientemente de qué tan lejos esté en el globo terráqueo, pero es un hecho de que normalmente es difícil convivir con la gente, por lo que muchas cosas al masificarse pierden su encanto, y en el caso de la red de Mark Zuckerberg no ha sido la excepción.

Mucho de los que agradaba de Facebook era la sencillez y variedad de cosas que había, haciendo fácil su uso, proliferando el surgimiento de juegos, aplicaciones, páginas y grupos que se volvieron del agrado de muchos, ya que en muchas de esas cosas uno se podía identificar y matar el tiempo, no había tanto problema con agregar y/o eliminar contactos, siendo de alguna forma agradable la experiencia en esta red social, el problema surgió cuando se hizo demasiado popular, iniciándose fenómenos relativamente nuevos como el stalkeo, los “secuestros virtuales” y la censura en la red. Pretendiendo Facebook ser más “familiar”, comenzó a censurar muchos contenidos ya sea por groseros, anti – religiosos, políticamente incorrectos, con presunta violación de derechos de autor o contenido presuntamente erótico (Usar traje de baño es pecado para Facebook); lo cual, a veces hay que regular (ya que si hay trolls que si no les pones control si te andan jodiendo a media humanidad), pero la mayoría de las veces es molesto, ya que si los niños dicen groserías, no veo porque hay que censurar eso, mejor deberían aprender a tener mejor criterio los encargados de esa red social.

Con el aumento de la censura y el incremento de casos de “secuestros virtuales” derivados del stalkeo, surgió cierto rechazo a Facebook, por lo que para evitar ahuyentar la clientela, comenzaron las políticas de privacidad de las publicaciones, lo cual se agradece pero deriva en un suceso algo irónico, que es el de esconder las cosas que se pretendían ser públicas, limitando su visualización a sólo un círculo de personas. Cuando antes el propósito era el de “conocer desconocid@s” (desconocidas en mi caso), ya con estas nuevas “políticas” se vuelve difícil ya que es irónico que Facebook te sugiera contactar amigos, los agregas y si te rechazan (generalmente suele ser gente que disque te conoce la que más te rechaza, hagan sus cuentas) 2 o más personas en un corto periodo de tiempo, te pueden bloquear la cuenta por unos días, por eso es que yo no agrego por iniciativa propia (en la cuenta personal), ya que prefiero pocos contactos de calidad, además, dado el contexto actual, como que Facebook hay que mantenerlo lo más restringido posible.

Aparte de las 25Cosas que no soporto de Facebook (son demasiados contras, y aun así faltaron), otros inconvenientes extras serían las personas ávidas de atención, los cuales aparte de stalkearte, se quejan de todo, por si pones o no pones cosas, si no les respondes (ya que la neta no siempre se debe contestar todo) ya es seguro que te borran, cosa que dependiendo la situación se agradece, la bronca es que Facebook toma en cuenta eso y te va limitando ciertas funciones (como subir determinada cantidad de fotos, poner links de enlace, darle “me gusta” a algunas páginas, etc.), eso sí, no se limita al espiarte y poder tomar tus datos y usarlos en tu contra, pero esa es otra historia. Muchas veces, dejando a un lado los chistes, noticias y videos relevantes, el grueso de la población facebookera abusa de poner cosas intrascendentes, y con todo respeto, molesta que anden mandando solicitudes de sus jueguitos, o poniendo a cada rato sus acontecimientos vanos como “Tomando un café” con la aplicación de ubicación (generalmente en un sitio mamón), o subiendo fotos de sus hijos (Digo, está bien que quieran compartir ciertos momentos, pero una cosa es compartir momentos como sus primeros pasos y otra compartir su día a día, ¿Me explico?), y por más que uno configure el Facebook, el feed de noticias se esmera en darte actualizaciones no del todo agradables.

Si hay censura, mojigatería, interfaz cada vez más complicada y más contras que pros (vuelvo a poner el vínculo hacia el artículo: 25 Cosas que no soporto de Facebook), ¿Por qué carajo sigo (y seguimos) en Facebook?, Definitivamente es la popularidad, ya que nos guste o no, la mayoría de la población con acceso a Internet cuenta con un perfil en este sitio, además, si uno aspira a tener un trabajo (o cambiar a uno mejor) o dar datos de contacto para su negocio, es necesario tener el perfil de Facebook (y ser cuidadoso con las publicaciones) para que el reclutador o cliente potencial te contacte y logres tu cometido. Además, como ya casi nadie utiliza el correo electrónico para mandar saludos, en inbox (ya que no me gusta estar conectado al chat de Facebook ya que medio mundo exige atención y quieren su besito de buenas noches a cambio de pláticas sonsas e infumables –muy poca gente en verdad hace de la conversación un arte-) es un buen recurso para que las verdaderas amistades se comuniquen con uno. Además, al ser la red social más popular, no finjamos demencia, sirve para el morbo y satisfacer los deseos de chisme al checar las “actualidades” de la persona/institución/empresa en cuestión, y en algunos casos, darse un buen taco de ojo. Como lo he mencionado en otras entradas, en el mediano plazo conservaría mi cuenta de Facebook por las razones precedentes, que muchas veces derivan en un mayor tráfico hacia mi blog y otras redes sociales; aún así, siempre es bueno observar otras opciones para no quedarse estancados, y de ello escribiré en las siguientes líneas.

Después de Facebook, la 2° red social en relevancia es Twitter, la cual me ha generado menos problemas que Facebook, prácticamente he escrito de todo y no he obtenido infracciones o comentarios tan negativos (ni siquiera pedradas), ya sé porque muchos no le hayan el modo a la red del pajarito azul, o gracias a su dinámica realmente puedes ver lo que quieres y no lo que indirectamente se te impone. Además, hasta donde he visto, Twitter no te censura tan fácilmente (sólo llega a quitar ciertos temas del Trending Topic que son políticamente incorrectos, ¿Verdad PRI?), no priva de que medio mundo se expresa tal cual es (lo digo recordando el hasta #ElMejorEscotedeTwitter, donde las chicas subían sus fotos mostrando sus dotes, algo que en Facebook sería censurado), y aunque la gente puede camuflajearse más en el anonimato, la verdad yo si disfruto Twitter, ya que he visto que solo quita a la gente que hace spam, de ahí en fuera, mientras no hagas caso de los trolls, Twitter es un buen medio para comunicar tus ideas al mundo en menos de 150 caracteres. Como detalles negativos, están los clásicos individuos que te “siguen” esperando que tú hagas lo mismo (y esa mala práctica lo hacen muchos individuos, incluyendo pseudocelebridades – no los voy a quemar, pero los que usan Twitter sabrán a que me refiero-), e independientemente de tu respuesta, generalmente te quitan de sus “personas a seguir” a los pocos días, ya que su único objetivo era incrementar su “popularidad”. Otro “detallito” negativo que sumaría al Twitter, sería la increíble cantidad de bots con “comentarios originales”, es decir, dicen el mismo único tweet con diferente foto en cada perfil, y generalmente la publicación es a favor de un político (en el caso de México generalmente priista) o de algún “twistar”.

¿Las redes sociales se limitan a Facebook y Twitter? Como lo he dado a entender, no, hay cientos de ofertas, la cuestión es que esas 2 son las más relevantes, aunque no hay que descartar a la Corporación Google, que teniendo You Tube, Blogger, Gmail (y otros productos más como Google Maps, Google Earth, Google Mars, etc.) de alguna u otra forma ha forzado a los usuarios d estos servicios a migrar a su plataforma de Google +, que en término de número de clientes compite con Facebook y Twitter, pero generalmente casi nadie publica (a comparación de las 2 redes previamente citadas), y su tráfico muchas veces es incentivado por los comentarios y material audiovisual del popular sitio de videos. La interfaz y flexibilidad de los servicios de Google (ya mencionados) es agradable, no te censuran a lo menso, sólo el problema que se tiene es con los derechos de autor (comprensibles en muchos casos, en otros no tanto, lo que es un hecho es que no dejará de ser incómodo) y con los trolls (los cuales son eliminados cuando joden de más, una cosa es criticar y otra fastidiar al prójimo, recuérdenlo), de ahí en fuera, Google + es bueno (como muchos de sus servicios), siendo el único “pero” el que no sea muy utilizado. You Tube también se podría considerar una red social, al igual que Blogger, pero su uso y objetivo es distinto, ya que de la 1° su especialización es el streaming de videos, mientras que del otro su plus es la publicación de artículos, además, de ellas ya he hablado en anteriores ocasiones mencionando sus pros y contras (1 año en You Tube, La Espectacular EntradaNúmero 195), por lo que para “agilizar” el artículo omitiré su análisis (¡Total!, ya fueron hechos).

Otro sitio que hay que destacar es Linked In, el cual se presume de ser una red social laboral, irónicamente, mientras estuve inscrito ahí menores oportunidades laborales tuve, me llego a agregar gente que ni al caso (o no conocía, o que si conocía pero nunca me o le caí bien, no lo digo por todos), las estafas de ofertas laborales se incrementaron (a través de esos correos y mensajes de que “grandes empresas” te quieren para un puesto pero quieren que les pagues una cuota por la elaboración de ciertos exámenes), y ante la poca efectividad para su objetivo, decidí darme de baja. Si a alguien le ha funcionado Linked In, lo felicito, que bueno que a ti si te sirva, a mi la verdad no, y dado mi particular punto de vista, no lo recomiendo (a la mejor en países del primer mundo si sea una buena herramienta, en México no tanto).

Por último (hay varias opciones, sólo que mencionaré las que he usado y que son “populares”) esta Tumblr, que viene siendo como un blog, cuya plataforma está bien estructurada  para las distintas acciones que quieras plantear, ya que te da las opciones de forma accesible de poder poner notas, enlaces, citas, audios, videos o fotos; donde los puedes ajustar de acuerdo a la característica de cada elemento, tiene un buen respeto por la libertad de expresión y se aleja de muchas mojigaterías (ya que se puede contemplar “contenido para adultos” sin mayores problemas), volviéndolo una red social idónea para los que nos gusta publicar contenido relevante (o pendejadas no tan banales). Lo malo, no es muy popular, por lo que puede que tus publicaciones no lleguen a un público tan masivo como podría ser en otras redes sociales más “populares”.

En conclusión, las redes sociales son muy positivas y han contribuido de sobremanera a exponer acontecimientos que ya existían pero que los medios convencionales se encargaban de no transmitir, por ejemplo, corruptelas políticas, el bullying, la clonación de luchadores, gente prepotente, las malas prácticas laborales de muchas empresas, etc.; lo cual sin duda contribuye mucho al abogar por una sociedad más honesta y directa; se puede conocer a mucha gente que en otros tiempos y circunstancias hubiera sido difícil contactar, y prácticamente cualquier suceso se puede conocer en instantes, propiciando la eficiencia en las comunicaciones de la humanidad. Por el otro lado, mientras existan intentos serios de censura, y los trolls ociosos que gustan de fastidiar la vida del prójimo, los mojigatos, los intelectualoides, y aquellas “finísimas personas” del Internet, sumado a las fregaderas del mismo medio (ya citadas por cada respectiva red social) hace que no sea del todo disfrutable la “experiencia”, pero como sea, dependiendo de tu contexto, gustos y necesidades, sabrás cual utilizar. Yo ya te di algunos pros y contras, pero la decisión es tuya. Me despido agradeciendo el favor de tu atención, recordándote que comas frutas y verduras.



1 comentario:

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