Consumidores y Productores

Los responsables de la ejecución de las actividades económicas son los agentes económicos. Si los elementos centrales de las actividades económicas son las necesidades individuales y los satisfactores producidos para cubrirlas, eso significa que los agentes responsables de su realización son aquellos que, por un lado, manifiestan una serie de carencias y buscan satisfacerlas y, por el otro, aquellos que por medio de la utilización y transformación de los recursos naturales elaboran bienes con la finalidad de atender tales necesidades. Es decir, los agentes económicos fundamentales son los consumidores y los productores.

Cuando nos referimos al consumidor, podemos contemplar al menos tres modalidades principales, por medio de las cuales intervienen en las actividades económicas:

a) En calidad de consumidores individuales, su finalidad es lograr, por medio del consumo, la máxima satisfacción de sus necesidades.

b) Como economía familiar, su función es consumir los bienes y servicios ofrecidos por los productores y constituyen la unidad básica de consumo de un sistema económico.

c) Como poseedores de su fuerza de trabajo, ofreciendo dicho recurso a los productores para obtener una remuneración que les permita adquirir satisfactores.

En cuanto a los productores, éstos conforman empresas, las cuales constituyen la unidad básica y fundamental en la producción de bienes y la prestación de servicios. Lo hacen mediante la conjugación y aprovechamiento de recursos naturales, humanos, materiales, financieros y tecnológicos, con la finalidad de generar el mayor número de satisfactores, aplicando la menor cantidad de recursos y esfuerzo. En función de la actividad económica básica que desempeñan, las empresas pueden considerarse:

·         Productoras, ya que transforman recursos naturales en productos y bienes físicos.

·         Comerciales, ya que se dedican a la distribución de dichos bienes.

·         De servicios, dedicados a las actividades que producen satisfactores inmateriales, como los de salud, financieros, de educación, etc.

De acuerdo con el sector en el que se desarrollan sus actividades, las empresas se clasifican como: primarias (extracción/obtención de materias primas), secundarias (transformación de materias primas) y terciarias (distribución de productos y servicios).

En función de su tamaño, pueden clasificarse en micro, pequeñas y medianas empresas (también conocidas como Mipymes) y grandes empresas. En nuestro país, los criterios para su clasificación son el número de trabajadores con los que cuenta y el sector en que participan:

	Sector/Tamaño	Primario	Secundario	Terciario
Mipyme	Microempresa	0-10	0-10	0-10
	Pequeña Empresa	11-50	11-50	11-50
	Mediana Empresa	51-250	31-100	51-100
	Gran Empresa	251 o más	101 o más	101 o más

Fuente: Vive la Economía 2 (Progreso Editorial).