La gran diversidad del pensamiento, de los numerosos autores que se han dedicado a este tema, han originado múltiples escuelas que puede ser agrupados en: la clásica o tradicional, que sen encuentra en el trabajo; la procesal, que se concreta a abordar la administración dividiéndola en funciones administrativas; la del compartimiento o conductista, que se basa en las actitudes y reacciones de las personas y la de los sistemas, que considera a los organismos sociales como un sistema. Es decir “un conjunto organizado o complejo, una reunión o combinación de cosas o partes formando un complejo o conjunto organizado”. Parte de sistemas mayores (por ejemplo: todo un sector público, privado o toda la sociedad) que coordina las actividades de otros sistemas y subsistemas, los vincula con lo que nos rodea y provee un enfoque o manera de pensar, a fin de que la administración pueda ser efectuada con más eficiencia.
Estas escuelas siguen una secuencia: la primera que atrajo la atención, fue la organización del trabajo y sus dificultades iniciales, después surge el interés en el ser humano (el único elemento del trabajo con el que no se puede contar plenamente, sin el concurso de su voluntad individual), y actualmente, existe lo que se considera verdaderamente una teoría científica: la administración de los organismos estudiándolos como un sistema ante una necesaria integración, sistematización y formulación de una ciencia en esta materia.
Sabemos que la administración o gestión es hacer operar las estructuras, para lo cual es necesario aplicar una doctrina.
Fuente: Introducción a la Administración con Enfoque.
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