Inversionistas y Accionistas




De acuerdo con Pierre Massé (1898 – 1987), ingeniero y científico francés, la inversión es el acto mediante el cual se invierten ciertos bienes con el ánimo de obtener unos ingresos o rentas a lo largo del tiempo. La inversión se refiere al empleo de un capital en algún tipo de actividad o negocio, con el propósito de incrementarlo. Esto es, consiste en renunciar a un consumo actual y cierto, a cambio de obtener unos beneficios futuros y distribuidos en el tiempo.

Desde una perspectiva amplia, la inversión es toda materialización de medios financieros en bienes que serán de utilidad en un proceso productivo de una empresa o unidad económica, y comprendería la adquisición tanto de bienes de equipo, como de materias primas, servicios, etcétera.

Los inversionistas son personas o empresas que aportan capital a una empresa a cambio de una utilidad financiera (mayor a la que podrían tener en inversiones bancarias o en la Bolsa de Valores) para que se pueda llevar a cabo un proyecto de expansión de operaciones a nivel nacional, penetración de nuevos mercados internacionales, compra de bienes inmuebles, maquinaria o equipo, o simplemente tener liquidez.

Los accionistas son personas o empresas que compran acciones de una compañía en la Bolsa de Valores, a cambio de un rendimiento financiero y de ser socios de una empresa; gracias a ello, la empresa tiene recursos para operar con mayor soltura y tener la posibilidad de apuntalarse.

Si bien, es inexistente un Departamento de Inversionistas y Accionistas, es importante considerarlos, pues a pesar de que los accionistas o inversionistas minoritarios no tienen injerencia en la toma de decisiones, sí son determinantes en el crecimiento de la empresa, ya que aportan recursos financieros que, después de los recursos humanos, son los más significativos.

En todo tipo de empresa, los inversionistas sí pueden participar, siempre y cuando les sea atractivo el proyecto al cual destinarán su capital.

Los objetivos generales de esta área son:
·         Lograr una alta y segura rentabilidad de su dinero.
·         Comprar acciones de empresas prestigiadas.
·         Capitalizar proyectos viables con mínimos riesgos.

Las funciones más destacadas de esta área son:
·         Analizar estratégicamente las operaciones bursátiles.
·         Comprar acciones con la mayor seguridad y mínimas posibilidades de fracaso.
·         En caso de invertir en proyectos, capacidad y recursos técnicos para evaluarlos y, en caso de ser viables, vigilarlos estrechamente y obtener reportes periódicos de su implementación y proceso de avance.

La relación directa de los inversionistas y accionistas con otras áreas de la empresa es con:
·         Alta Dirección.
·         Dirección de Relaciones Públicas.



Fuente: Vive la Administración II, Progreso Editorial.


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