Me llamo Saponio y soy un jabón. Pertenezco a una familia muy antigua de apellido Saponaria. Saponaria es el nombre de la planta con la cual se empezaron a hacer los jabones. ¡Daba tanto trabajo!
Con el tiempo, los hombres descubrieron sustancias que hicieron las cosas más fáciles. Hervían en grandes ollas una mezcla de sosa, potasa y grasas naturales. Algunas veces le agregaban colores y perfumes para hacerla más agradable. Luego ponían esta mezcla en moldes para que se endureciera. Y después la cortaban en piezas pequeñas. Ahora todo esto lo hacen con máquinas. Por eso pueden fabricar más y más jabones. Nos llevan a las tiendas en cajas de cartón o de madera.
Como verás, somos una familia muy numerosa. Tenemos muchas y diferentes ocupaciones. Algunos nos dedicamos a limpiar tu ropa. Otros, como yo, nos encargamos de asear tu piel para mantenerla sana y linda.
Y ¿Sabes qué?, a todos nos gusta jugar con los niños a las burbujas, porque así podemos volar.
Fuente: SEP – Mi Libro de Segundo. Parte 2
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