El modelo neoliberal en México




Desde finales de la década de los años sesenta, el modelo económico de sustitución de importaciones y el desarrollo de una industria basada en una economía cerrada había demostrado su agotamiento. La política económica establecida por el Estado durante los siguientes años, sustentada en un excesivo gasto público y el endeudamiento, así como en los ingresos provenientes de la exportación del petróleo, habían resultado ineficaces: la capacidad productiva del país no se había elevado; tampoco el nivel de producción. La balanza de pagos de nuestro país era crecientemente deficitaria (pues cada vez importábamos más bienes y servicios y, salvo el petróleo, el resto de nuestras exportaciones era cada vez menor).

Por ello, a principios de la década de los años ochenta, nuestro país continuaba acarreando los problemas surgidos desde entonces, pero además se encontraba fuertemente endeudado con la banca internacional. El déficit fiscal era equivalente al Producto Interno Bruto. La inflación y el desempleo se habían disparado, y nuestra moneda sufrió la más drástica devaluación de su historia entre 1981 y 1982. Las finanzas públicas se encontraban al borde de la quiebra.

Ante tal situación, el gobierno tuvo que recurrir al Fondo Monetario Internacional (FMI) para disponer de recursos que le permitieran cubrir sus compromisos inmediatos, así como negociar con la banca internacional condiciones para no declararse en suspensión de pagos. A cambio, el FMI formuló como condición que nuestro país estableciera una mayor disciplina fiscal y monetaria, con la finalidad de equilibrar sus ingresos y gastos públicos, y contener la inflación. México, además, debía terminar con las décadas de proteccionismo hacia el exterior que, lejos de beneficiar a su industria, la había vuelto débil e ineficiente, por lo que resultaba imprescindible impulsar la apertura y modernización de la economía.

A partir de 1982 se impulsó un nuevo proyecto de desarrollo, el cual, con diversas modificaciones a lo largo de los años siguientes, se ha mantenido vigente en nuestro país. Su sustento fue una serie de significativas reformas en la estructura económica, así como una reorientación de las políticas económicas y el papel regulador del sector público, cuyos ejes se detallan a continuación.

Redimensionamiento del sector público y redefinición del papel regulador del Estado.
Con la finalidad de reducir el déficit público, que en 1983 equivalía 13 % del Producto Interno Bruto, el Estado debía reducir su tamaño y contraer su presencia en la actividad económica. Para ello, se llevaron a cabo las siguientes estrategias:

·         Eliminación de las regulaciones excesivas establecidas por el Estado a las empresas privadas con la finalidad de brindar mayor libertad para el desempeño de sus actividades económicas y, así, propiciar su crecimiento.
·         Venta o desmantelamiento de la mayoría de las empresas paraestatales, es decir, aquellas operadas por el Estado.
·         Eliminación o reducción de dependencias gubernamentales, con la finalidad de disminuir costos asociados con las actividades administrativas propias del aparato burocrático del Estado.
·         Tanto la venta de empresas paraestatales y fideicomisos públicos, como la reducción o eliminación de dependencias y organismos descentralizados emprendida en los siguientes lustros, permitió una reducción de más de 80 % del sector paraestatal, con un efecto equivalente en el gasto público.
·         Reducción progresiva y, finalmente, eliminación de gran parte de los subsidios otorgados por el Estado tanto a familias, como a empresas.
·         Incremento en los precios y tarifas tanto de los bienes producidos como de los servicios prestados por el sector público.

Política Fiscal.
La reducción del déficit público requería la conjugación de medidas tendientes a elevar los ingresos fiscales y contener el gasto público. Por ello, se estableció una estrategia fiscal basada en los siguientes ejes:

·         Reducción progresiva de los impuestos directos y generalización y aumento de los impuestos indirectos.
·         Contracción del gasto público, particularmente aquel destinado al pago de sueldos y gastos administrativos, por lo que amplios segmentos del aparato burocrático debían ser adelgazados.

Política Monetaria.
Con el objetivo de mantener las presiones inflacionarias que habían llevado a la inflación de un promedio de 2.6 % en los años sesenta, a 80.8 % en 1983, se establecieron medidas apegadas a una política monetaria contractiva, tales como:

·         Establecimiento de medidas restrictivas a la emisión de papel moneda, con la finalidad de controlar el circulante en la economía.
·         Control de las tasas de interés establecidas para el préstamo de recursos disponibles en la banca, con la finalidad de reducir el costo de dinero.
·         Otorgamiento de autonomía al Banco de México en el manejo de la política monetaria, con la finalidad de propiciar mayor estabilidad al nivel de precios y un control más efectivo y duradero de la inflación en el mediano y largo plazos.

Política Comercial.
Se establecieron medidas tendientes a propiciar la gradual apertura económica y comercial del país, como vía para fomentar la modernización y mayor competitividad del aparato productivo, impulsar la actividad exportadora, reducir el costo de las materias primas y, en general, los factores productivos debían ser importados. Entre tales medidas destacan:

·         Reducción de limitantes para el ingreso de la inversión extranjera en actividades productivas de nuestro país.
·         Eliminación progresiva de gravámenes, aranceles, tarifas y cualquier tipo de cuota a la importación de bienes y servicios.
·         Incorporación a los organismos internacionales de comercio (como el ingreso al Acuerdo General de Aranceles y Comercio, en 1985) y establecimiento de relaciones comerciales abiertas (libres de aranceles) con el resto del mundo (entre ellos, el Tratado de Libre de Comercio de América del Norte, que entró en vigor de 1994, así como el Tratado de Libre Comercio con la Unión Europea, firmado en 1999, con lo cual nos convertimos en la primera nación en establecer acuerdos de libre comercio con los dos mayores bloque comercial del planeta).

Política Financiera.
La crisis de 1982 demostró la debilidad del sistema financiero mexicano, así como su escaso desarrollo como intermediario entre el ahorro de las familias y las necesidades de inversión de las empresas, para impulsar el incremento de la capacidad productiva y el crecimiento económico del país. Con la finalidad de modernizar y fortalecer a la banca, se emprendieron las siguientes acciones en materia de política financiera:

·         Reprivatización gradual de la banca comercial.
·         Apertura de la banca, ya privatizado, al capital extranjero, lo cual ha permitido que el sistema financiero nacional se fortalezca y modernice, pero ha dejado en manos extranjeras un sector prioritario para el desarrollo económico del país.
·         Eliminación gradual del sistema del encaje legal y liberalización paulatina de las regulaciones para el otorgamiento del crédito, con la finalidad de fomentar el financiamiento a la inversión productiva.

Política Cambiaria.
Debido a la crisis financiera de 1982, en nuestro país se establecieron rígidos controles a la compra y venta de divisas extranjeras (control de cambios), por lo cual, por ejemplo, una persona o empresa no podía libremente adquirir o vender dólares o cualquier otra moneda extranjera, salvo que contara con un permiso especial (el cual, por lo regular, sólo se otorgaba a grandes empresas importadoras). Sin embargo, el modelo neoliberal contempló un par de medidas fundamentales en materia de política cambiaria:

·         Eliminación gradual del control de cambios, que finalmente desapareció a mediados de la década de los años noventa.
·         Transformación de la política de cambio fijo, hasta llegar a un régimen de libre flotación, como el que durante las últimas décadas ha prevalecido en el país.




Fuente: Vive la Economía 2 (Progreso Editorial).

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

La recomendación del momento

Anónimo de Chalco – La flor y el canto

Brotan las flores, están frescas, medran, abren su corola. De tu interior salen las flores del canto: tú, oh poeta, las derramas sobre...

Lo más popular de la semana