Bosque templado. Plantas









Estos bosques son frecuentes en las zonas de clima frío y templado. Son comunidades de árboles de hasta 30 m de altura, muy característicos de las zonas montañosas, y ocupan 33578700 hectáreas, que es el 17.1 % de la cubierta vegetal de México. Los bosques templados se clasifican – según el género de árbol dominante – en bosques de coníferas, bosques de encinos y bosques mixtos. En México los más comunes son los bosques de pinos y los bosques mixtos con asociaciones de pinos y encinos. La mayoría de los bosques de encinos se encuentran entre los 1200 y 2800 metros sobre el nivel del mar. Los bosques de pino se desarrollan principalmente entre los 1500 y 3000 m de altitud, aunque también pueden encontrarse a mayores alturas y constituyen el único tipo de vegetación que alcanza los 3650 metros sobre el nivel del mar, acompañada en la parte superior por zacatonales y oyameles. Los bosques mixtos forman mosaicos dentro de las altitudes mencionadas. En todos estos bosques se encuentran distintas hierbas y flores, muy evidentes sobre todo en los claros. Como los árboles crecen en suelos a los que les faltan algunos minerales, se asocian con hongos para aprovechar mejor el sustrato.


Los bosques constituyen un recurso de primera importancia por la demanda de madera; sin embargo, la explotación forestal inadecuada, así como los desmontes para ampliar las zonas agrícolas, ganaderas y habitacionales restan superficie a los bosques y modifican la composición de los que quedan.

Álamo.
Es un árbol de hasta 35 m de altura que se cultiva como planta ornamental por la apariencia de sus hojas que cambian del color verde al amarillo. A principios del siglo XX, se plantaba frecuentemente en parques y áreas de recreo, de ahí que a muchos parques se les llame alamedas. En algunas especies, las hojas tienen la parte de debajo de color blanco. En los lugares fríos, sus hojas caen en el invierno. Habita en los bajos de los arroyos, en el fondo de los valles, en las márgenes de los ríos y en otros sitios de suelo húmedo.

Encino.
En México hay 150 especies de encino, que pueden encontrarse formando matorrales en las zonas semiáridas o en bosques de pino, hasta una altitud de 2900 m. Ningún otro país del mundo tiene tanta variedad de encinos, que van desde los pequeños arbustos de 60 cm con hojas pequeñas , hasta árboles de 25 m de altura. Tardan decenas de años en crecer y pueden vivir durante siglos. Los frutos o bellotas son buen alimento para los puercos y las ardillas. La madera, al igual que la corteza del tronco, se utiliza en construcción y ebanistería. También se le conoce en algunas partes como roble o bellota.

Lupinus.
Es una leguminosa herbácea que se encuentra en los claros del bosque de alta montaña. Su tallo rígido y esbelto llega a medir hasta un metro de altura. Esta planta no está aislada, sino que se presenta en grandes poblaciones, asociada con otras especies como el zacatón. Las flores del lupinus se agrupan en la punta del tallo, y su coloración varía del rosa al morado. El lupinus es, sin embargo, una planta de alerta, ya que indica las zonas que han sido devastadas por el fuego. Su nombre se deriva del griego lupus que significa lobo, ya que se creía que esta planta era responsable del empobrecimiento de los suelos.

Madroño.
Es un árbol común en los bosques de encinos y de coníferas, que se caracteriza porque su corteza rojiza se desprende en láminas. Este árbol, de 10 a 15 m de altura, es perennifolio, es decir que presenta hojas durante todo el año. Hay un tipo llamado “madroño borracho”, conocido en medicina tradicional porque a sus frutos se les atribuyen  propiedades soporíferas. Aunque su madera puede aprovecharse, por la apariencia de su corteza se emplea principalmente como planta de ornato.

Oyamel.
Este árbol siempre verde alcanza hasta 50 m de altura. Tiene hojas en forma de agujas cortas y abundante resina aromática en la corteza y en los conos, llamada aceite de palo, muy utilizada en la medicina tradicional por sus propiedades balsámica. Forma bosques en altitudes de 2400 a 3600. Su madera se usa para construcciones, pero se explota sobre todo en la fabricación de papel. Las ramas se emplean como adorno en fiestas religiosas, pues terminan en forma de cruz. En otros tiempos se usaban como arbolito de Navidad. Se les encuentra en reservas y en parques nacionales del centro del país.

Hongos de árbol.
Los hongos no son plantas, necesitan obtener nutrientes a partir de otros organismos para poder sobrevivir y muchos de ellos se alimentan de materia muerta, como la corteza de los árboles o la madera podrida. Algunos grupos de hongos viven sobre los troncos de los árboles. Estos hongos tienen el tallo lateral, a diferencia de los hongos del piso cuyo tallo sale del centro del pileo o sombrilla, y por eso se ven como repisas de color amarillo, blanco o café rojizo en los árboles. La mayoría son duros; algunos son comestibles.

Pino.
Es una conífera siempre verde, con hojas en forma de agujas reunidas en grupos de 2 o 3, y conos o piñas más o menos globosos. Existen en México 37 de las 100 especies de este género conocidas en el mundo. Se localizan desde las zonas semiáridas hasta la alta montaña. Es uno de los árboles con mayor valor comercial en México. Su madera se utiliza en construcción, carpintería y elaboración de papel. Su resina tiene propiedades medicinales y se emplea en ungüentos para la tos.



Fuente: Bancomer – Álbum de la Naturaleza de México, p. 30 – 31.


No hay comentarios.:

Publicar un comentario

La recomendación del momento

CDMX. Halloween & Día de Muertos 2023

La Ciudad de México es una ciudad que tiene de todo un poco, y siempre es interesante verla en sus manifestaciones artísticas populares, y ...

Lo más popular de la semana